Estamos aquí para apoyarte

Estimado/a profesional,

Entendemos que atender a personas con diversidad funcional presenta desafíos únicos y complejos en tu desempeño profesional, pero tu rol como profesor, terapeuta, psicólogo o pediatra es vital en su desarrollo y bienestar.

Sabemos que en algunos momentos sentirás que tu preparación es insuficiente o que sus necesidades te abruman. Pero el hecho de que estés aquí demuestra que te implicas, y eso es más importante que cualquier dificultad.

En cualquier caso, no estás solo en este camino. Nuestra fundación puede ayudarte, proporcionar recursos y conocimientos que te ayuden a entender y atender la diversidad.

Estamos comprometidos a trabajar junto a ti, equipándote con herramientas que hagan una diferencia significativa en la vida de estas personas y sus familias. Juntos, podemos marcar una diferencia significativa en sus vidas.

Fundación Adimir

Los trastornos del neurodesarrollo son alteraciones del desarrollo cerebral que afectan áreas como la comunicación, la conducta, el aprendizaje y la interacción social. Se diagnostican a través de una evaluación multidisciplinar que incluye observaciones clínicas, entrevistas con la familia, cuestionarios, y pruebas específicas realizadas por especialistas.
Algunos signos tempranos incluyen retrasos en el lenguaje, dificultad para mantener contacto visual, problemas para jugar de forma simbólica o con otros niños, movimientos repetitivos, hipersensibilidad sensorial y dificultad para adaptarse a cambios en la rutina.

La detección precoz es clave para ofrecer apoyos adecuados.

Hay muchas creencias extendidas sobre las personas en el espectro autista o con otros trastornos del neurodesarrollo que no son ciertas. Algunos mitos frecuentes son:

  • Las personas con TEA no tienen emociones. Es falso, pueden expresar sus emociones de manera diferente. Pueden experimentar empatía y emociones intensas, pero tal vez no las expresen de manera convencional. Las dificultades están más relacionadas con interpretar las emociones de los demás.
  • Las vacunas causan autismo. Este mito ha sido desmentido científicamente. Este mito surgió en los años 90, cuando un estudio fraudulento y desacreditado sugirió una relación entre la vacuna triple vírica (sarampión, paperas y rubéola) y el autismo. Desde entonces, numerosos estudios científicos rigurosos han demostrado de manera consistente que no existe conexión entre las vacunas y el desarrollo del TEA u otros trastornos neurológicos.
  • Las personas con trastornos del neurodesarrollo no pueden llevar una vida independiente. Con los apoyos adecuados, muchas personas pueden desarrollarse plenamente, estudiar, trabajar y vivir de manera independiente. Las necesidades de apoyo varían, pero no deben limitar las expectativas.
  • Los niños con autismo no pueden aprender en escuelas regulares. Con adaptaciones y estrategias inclusivas, muchos niños con TEA y otros trastornos pueden prosperar en entornos educativos regulares y beneficiarse de la interacción con sus compañeros.
  • Los trastornos del neurodesarrollo son culpa de una mala crianza. Los trastornos del neurodesarrollo tienen causas biológicas, genéticas y neuroquímicas. La crianza puede influir en cómo se manejan ciertos desafíos, pero no es la causa de los trastornos.
  • Las personas con trastornos del neurodesarrollo tienen habilidades especiales o “genio oculto”. Aunque algunas personas con TEA tienen habilidades extraordinarias (como memoria fotográfica o habilidades musicales), esto no es común para todos. Cada persona tiene habilidades y desafíos únicos.
  • La intervención temprana “cura” el trastorno. No es correcto, la intervención temprana mejora significativamente la calidad de vida y las habilidades de la persona, pero no elimina el trastorno. Su objetivo es desarrollar el máximo potencial y autonomía.
  • La tecnología y los dispositivos electrónicos agravan los trastornos del neurodesarrollo. También es falso. La tecnología puede ser una herramienta valiosa para la comunicación, el aprendizaje y la socialización. El uso excesivo de pantallas puede ser problemático para cualquier niño, pero no es una causa de los trastornos.
Busca programas respaldados por entidades acreditadas, que incluyan tanto teoría como prácticas supervisadas, y que se enfoquen en estrategias basadas en evidencia, como el análisis de conducta aplicado (ABA) o el enfoque TEACCH.
La integración busca que el alumno se adapte al entorno educativo existente, mientras que la inclusión adapta el entorno y las prácticas para garantizar que todos participen plenamente, independientemente de sus necesidades.
La coordinación entre los diferentes profesionales y entornos naturales garantiza que las estrategias terapéuticas y educativas sean consistentes en todos los entornos. Esto evita duplicar esfuerzos, mejora los resultados y asegura que la persona reciba un apoyo integral adaptado a sus necesidades.

La familia debe ser parte activa del proceso. Mantener una comunicación abierta, compartir los avances y desafíos, ofrecer formación específica y valorar sus aportes ayuda a crear un enfoque más efectivo y colaborativo.

Dependiendo del trastorno, puede haber dificultades en la atención, la memoria, la planificación, la regulación emocional o la interacción social. Las adaptaciones individualizadas son esenciales para superar estas barreras.
El Plan de Soporte Individualizado (PSI) es un documento que adapta el currículo educativo a las necesidades de un alumno con diversidad funcional. Se diseña tras evaluar sus habilidades, intereses y desafíos, y se revisa periódicamente para ajustar las estrategias y objetivos.
Observa sus intereses, habilidades y comportamientos en diferentes contextos, eso te puede ayudar. Hablar con la familia y con otros profesionales también ofrece una visión más completa. Las fortalezas pueden ser en áreas como la memoria, la creatividad o el razonamiento lógico.
La comunicación debe ser clara, simple y directa. Es útil apoyarse en pictogramas, evitar metáforas o dobles sentidos y dar tiempo para que la persona procese la información y responda. La empatía es esencial.
Materiales visuales como agendas, pictogramas, horarios estructurados y recursos sensoriales son muy efectivos. También pueden utilizarse aplicaciones tecnológicas y herramientas personalizadas para su estilo de aprendizaje. En nuestra sección de Material Adaptado compartimos muchos recursos útiles desarrollados por ADIMIR.
Establece reglas claras, utiliza materiales adaptados y prioriza actividades que permitan la participación individual y grupal. La paciencia, el refuerzo positivo y la supervisión constante son fundamentales.
Organiza el aula con áreas definidas para diferentes actividades, minimiza estímulos visuales o auditivos excesivos y asegúrate de que las señales visuales sean claras. Un espacio ordenado mejora la concentración y reduce la ansiedad.
Puedes ofrecer oportunidades estructuradas para interactuar, modelar comportamientos sociales adecuados, utilizar juegos de rol y, sobre todo, reforzar positivamente los esfuerzos de comunicación e interacción.

Para fomentar la participación en actividades grupales sin generar ansiedad, puedes anticipar la actividad, ofrecer roles claros y adaptar las expectativas. Permite tiempos de descanso y refuerza positivamente su participación, aunque sea breve.

Fomenta una cultura de respeto, utiliza materiales diversos, adapta las actividades según las necesidades y forma a los estudiantes y docentes sobre la importancia de la inclusión.
Esto es muy importante. Promueve la empatía a través de charlas y actividades, fomenta la supervisión activa en el aula y espacios comunes, y establece protocolos claros para intervenir en caso de bullying.
Igual que haces con cualquier otro alumno y/o paciente: Utiliza indicadores específicos y medibles. En este caso, puedes valorar habilidades adquiridas o mejoras en la conducta, por ejemplo. Después, ajusta las estrategias según los resultados obtenidos.

Si tienes esa percepción, se puede revisar la evaluación inicial, consultar con otros profesionales, adaptar las estrategias y probar enfoques alternativos. La flexibilidad es clave. Si trabajas con algún usuario de nuestra fundación, podemos colaborar contigo con nuestro Servicio de atención a la escuela inclusiva.

Planifica con tiempo, informa a la familia y al niño, realiza visitas previas al nuevo entorno y coordina entre los equipos educativos para asegurar una transición fluida.
Cuando se presenta un comportamiento desafiante es importante identificar las causas subyacentes, mantener la calma, utilizar estrategias preventivas y reforzar los comportamientos positivos. Trabaja en equipo con otros profesionales si es necesario.
Anticipa situaciones estresantes, utiliza apoyos visuales y ofrece un entorno calmado. Si ocurre una crisis, prioriza la seguridad, reduce estímulos y ofrece tiempo para que la persona se recupere.
Un reforzador es un estímulo que aumenta la probabilidad de que un comportamiento deseado se repita. Puede ser social, tangible o sensorial, y debe aplicarse inmediatamente después del comportamiento deseado.
Para diseñar actividades inclusivas, considera ofrecer opciones variadas, adaptar las actividades según las habilidades de los participantes y fomentar la participación activa de todos, asegurando que se sientan valorados y respetados.
A su lado en cada paso
Servicios de apoyo a los entornos naturales
Servicio de atención a la escuela inclusiva

Coordinación, asesoramiento, formación y/o elaboración de material adaptado para las escuelas de nuestros usuarios.

Servicio de atención al tiempo libre inclusivo

Actividades lúdicas y salidas culturales. Acompañamiento personalizado y especializado a niños/as con diversidad funcional.

Servicio de esplai
de jóvenes

Para jóvenes con discapacidad en etapa de educación secundaria y post-obligatoria.

Celebrando historias de superación y logro

Esperanza en acción

Relatos que reflejan el poder del espíritu de superación. Testimonios que demuestran que la dedicación y el apoyo tienen resultados. Ejemplos que nos impulsan a seguir trabajando.

El primer usuario de Adimir que fue a la Universidad

Te presentamos a Luis Pablo, el primer usuario de la Fundación Adimir que fue a la universidad. Con 24 años se graduó en el curso 2021-2022 de “Atención a usuarios, ciudadanos y clientes”, impartido en la Facultad de Psicología de la UB.

Un joven de la Fundación ADIMIR irá a la Universidad a estudiar este curso
Comprometidos con el individuo, su entorno y la sociedad

Servicios para una atención integral